Últimos capítulos...

Últimos capítulos...

miércoles, 17 de diciembre de 2014

22. Derritiendo en palabras

Narra Pablo
Era el comienzo de una grande aventura. Tenía buenas impresiones sobre todo lo que iba a sucederse en Los Ángeles aunque por un lado el anhelo estuviese presente.
De hecho, mis impresiones estaban correctas y estaba entrando en algo gigante, de hacer un disco dónde voy a dar todo lo que tengo, dónde se va a destacar mi alma. Me quedaba nervioso solo en pensar en el resultado del disco. Tenía ganas de anunciar a todo el mundo lo que estaba llegando, pero me mantuve callado.
Todo era la exaltación de mis ganas de empezar a grabar y al mismo tiempo las ganas del día en que el pequeñote va a nacer. Joder, más feliz no puedo estar! Había apostado a mi mismo de que será la vez de llegar un niño a casa aunque tenga a mis dos Ainhoas convictas de que será otra niña más. Sea lo que sea, todo será bienvenido y muy querido por todos.
Del otro lado del charco yo vivía alegrías y tristezas. Era la alegría de saber que mi peque ya sabe escribir su nombre y su felicidad de poder dormir junto a su “hermanita” aunque todavía estuviese dentro de su madre, todo mezclado con la tristeza de saber que en León está el padre de Ainhoa en el hospital y en Barcelona su abuelo también se va a parar a una camilla de hospital. He reflexionado muchas veces en hacer la maleta y volver más temprano que las tres semanas previstas, pero Ainhoa no me lo permítia.
- Para qué volver si no puedes quitarlos dónde están? - me dice al teléfono.
- Lo sabes por qué quiero volver... te crees que estoy tranquilo sabiendo tu estado y que estás pasando por todo eso?
- Lo sé... pero vas a dejarlo todo si solo queda una semana para volver?
- Yo solo estoy preocupado contigo, mi amor...
Dejé de escuchar su voz por largos segundos. Cuando me he dado cuenta, escuchava un sonido muy bajito como si fuera un sollozo.
- Ainhoa? Cariño, estás ahí?
- Sí... yo estoy aquí... solo estaba pensando...
- Pensando en qué?
- … pensando que soy una afortunada por tenerte... lo sabes que te quiero?
- Yo te quiero aún más, mi niña... - escucho una carcajada suya – De qué te estás riendo?
- En la historia del “mi niña”... te recuerdas?
- Cómo no voy a recordar? Jamás se olvida a la chica que por la primera vez en tu vida te trata por Godzilla!
- Esa chica debería ser mala, eh? Quién tiene el coraje de llamar a alguien de Godzilla?
- Mala? No... ella solo era especial... y sigue siendo especial como en el primer día en que la vi...
- Deja de decir esas cosas que me vas a dejar sin gracia y sin saber que decirte!
- Eso se trata con un beso...
- En serio? Entonces es mejor que o guardes en una cajita y no te olvides de traerlo...
- Por...?
- Yo voy a cobrar el beso... no te olvides...
- Y si yo me olvido de ello?
- Es mejor que no te atrebas a hacerlo... sino te vas a quebrar por que te cobraré muchos más!
- Lo veo que cuando volver me vas a arruinar...
- Arruinarte? Cómo puedes decir que te voy a arruinar si yo ya sigo arruinada hace dos años?
- En serio? - bromeo.
- Claro... y la culpa es de un boquerón que se atrevió a hacer de todo...

No hay comentarios:

Publicar un comentario