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jueves, 21 de agosto de 2014

77. En primera mano

Narra Ainhoa
Vaya suerte que ha tenido Marisol! Llega al hotel con Hugo, más feliz que nunca y no es motivo para menos.
Cuando Hugo llegó hacía mí, me mira con una cara muy seria, después abre su maleta y de allá recoge un pequeño regalo.
- Pablo me ha pedido para entregarte esto...
- Qué es esto?
- Yo lo sé lo que es pero no voy a decirte... lo que te digo es que deberías abrirlo...
- Vale, lo abro ahora mismo... - empiezo a rasgar todo aquel papel y comienza a aparecer una caja de un DVD. Algo extraño, la caja no decía nada.
- Yo iba a ver eso ahora mismo, sabes? - me dice Hugo.
- Por qué?
- Hay ahí una cosa muy bonita...
La abrí y allí estaba un papel escrito a mano, su letra que la reconozco fácilmente y decía:
Esto no es nada de especial, es simplemente una entrevista que será transmitida en la tele en unos días. Aunque esté lejos de tí físicamente, mi corazón está ahí así como mi mente. Nos vemos pronto... te quiero, preciosa”
Estaba muriendo de curiosidad. Es “simplemente una entrevista” pero hay algo de especial en ella sino Pablo no tendría todo esto trabajo de grabarla y enviarme a través de Hugo en un DVD.
Cuando se tiene la curiosidad, normalmente la matamos... y fui yo a la habitación, pongo el disco en el DVD y en la tele empezaba la entrevista. En el comienzo no estaba viendo algo de “especial”, estaba siendo una típica entrevista que él tantas veces hizo: habla de la próxima gira, los conciertos, los singles y bla bla bla, todo lo que esté relacionado con su carrera musical. Todavía la entrevista no estaba terminada y todavía estaba con la más grande atención para darme cuenta del “pormenor especial” que tenía esta entrevista.
No tardó mucho en llegar, creo. De la carrera musical, pasan para temas más personales y creo que es aquí que está el “secreto”.
- Las parejas deben quererse, respectarse, aceptar los defectos... - dice Pablo al periodista. Ahora la pregunta obvia:
- Y tu, Pablo? Tu tienes pareja?
Él sonrió, se quedó por unos segundos en silencio y ya lo sé cual es la respuesta, un “no” grande porque al final yo no soy “nadie” para el cantante Pablo Alborán.
- Sí...
- En serio?
- Sí... yo tengo novia, estoy soltero pero no estoy solo...
Mi reacción: de boca abierta frente a la televisión, totalmente sorprendida y cuestionando mi mente si estaba escuchando bien. Paré la entrevista y no me estaba creyendo en lo que había escuchado. Yo escuché bien? Pablo ha dicho que tiene novia? No, yo escuché mal, es imposible!
Retraso un poco la entrevista para escuchar de nuevo y escuché lo mismo: “Sí... yo tengo novia, estoy soltero pero no estoy solo...”
Mi reacción fue igual al del periodista que le miraba muy serio, no estaba esperando una respuesta así, en cientos de entrevistas hechas a Pablo, él nunca ha respondido a esta pregunta con esta respuesta.
No sabía como reaccionar, estaba como una auténtica estatua frente a la televisión, no me movía, quizá también no respiraba bien, boquiabierta estaba yo, eso es cierto.
Sin darme cuenta, una lagrima cae en mi ojo izquierdo y cuando me fui a limpiarla con la mano, un batallón de lagrimas empezaran a salir por mis dos ojos, los mismos que han visto a Pablo decir a todo el mundo que tenía novia.
Si ya le echaba de menos antes de ver esto, ahora el anhelo se ha quedado más fuerte, solo tenía ganas de correr hacía él y abrazalo como si no hubiera el mañana. Es por eso que yo siempre odié las distancias y siempre iré odiar, la distancia jamás debería existir, el anhelo tampoco... joder, por qué han inventado esto?
Abrazalo no podía hacerlo, pero recoger el móvil y llamarlo podía y lo hizo. Mala suerte, esperaba, esperaba y él no me contestaba.
Me envolví por completo en aquella burbuja que está a punto de explotar en España, que es cierto que vaya llenar las capas de los periódicos, será noticia en las televisiones y que vaya provocar una revolución más grande que la segunda guerra mundial en las redes sociales. Retrasé de nuevo la entrevista, volví a escuchar la respuesta a aquella pregunta, pregunta que cientos de personas querían escuchar pronto. El caso no es la burbuja explotar, pero si los problemas que vaya traer para la carrera de Pablo y eso es lo que más me preocupa.
Los periodistas ya no le largaban, ahora andarán collados a ellos toda la hora, los “paparazzi” no harán nada más que espiar todos los pasos de Pablo. Nada será como antes, estos serán los últimos días en que todo el mundo piensa que Pablo está disponible y libre.
Escucho alguien golpeando la puerta de mi habitación. Limpio mis lagrimas, hago buena cara y me voy a abrirla... se abre la puerta y el destino decidió hacerme sentir como una tonta...

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